El ayuntamiento de Zumaia organizó hace unas semanas un concurso de fotografía para niños y mayores («Barrutik»). Debido a la actual situación de confinamiento, las fotos debían realizarse dentro de casa o desde la ventana.
«Me llena de orgullo y satisfacción» publicar que mi hija de 12 años se ha llevado el primer premio del concurso en su categoría, con una divertida foto hecha a sus juguetes.
Hoy por fin hemos podido salir a pasear a última hora de la tarde.
Con mascarilla, con todas las precauciones, y con un poco de miedo también…
He decidido ir por un camino a las afueras del pueblo, para no encontrarme con mucha gente.
Y para mi sorpresa, en uno de los caseríos por los que he pasado, había un potro con un solo día de vida, una preciosidad!!!
Y allí he estado, disfrutando de este pequeño personaje, hasta que me ha sorprendido el atardecer, y he tenido que volver a casa antes de que anocheciera.
La hora azul es ese momento justo después (en el caso de la puesta de sol) de la hora dorada, cuando el cielo ha perdido prácticamente esos tonos naranjas y amarillos y empieza a predominar un azul intenso.
A nuestros ojos parece incluso que es de noche, pero la cámara es capaz de captar este fantástico color.
Es un momento que me encanta.
Hoy ha coincidido la hora azul con la salida de la luna, y además no había nubes.
He fotografiado el momento una vez más, desde la ventana…
Una semana después, el arco iris ha vuelto a aparecer casi en el mismo sitio! Además esta vez ha estado durante muchos minutos. Ya lo dice el refrán, después de la tormenta siempre llega la calma…