Termina la Semana Santa y con ella las vacaciones, hoy Avila se despide de mi con un bonito atardecer tras sus murallas. Durante el día las nubes blancas, como trocitos de algodón han cubierto parte del cielo azul, y Avila estaba preciosa bajo ellas.
Hoy por fin el tiempo nos ha permitido asistir a una de la procesiones de la capital abulense. Me hubiera gustado asistir a la de ayer, pero finalmente se canceló por las inclemencias del tiempo (empezó a nevar minutos antes de la hora en la que debía empezar la procesión), pero hoy por fin ha podido celebrarse.
En la mañana del Jueves Santo, he podido asistir a la representación de la pasión de Cristo junto al marco incomparable de la Basilica de San Vicente de Avila y las murallas.
La representación ha sido llevada a cabo por un numeroso grupo de actores, la mayor parte de ellos residentes en el pueblo abulense «El Barraco», que nos ha deleitado con sus cantos y perfecta interpretación. Yo como no, estaba alli con mi cámara. Aquí os dejo unas poquitas fotos.
Como cada año, hoy me he acercado a disfrutar de la Semana Santa abulense. Al consultar el programa de mano, me he llevado una grata sorpresa al descubrir que aparecía una de las fotos que les envié el año pasado, en la página 44. La foto fue realizada en el emotivo Viacrucis que comienza a las 5.30 de la mañana y recorre la muralla de Avila, un madrugón que sin duda merece la pena.
Estos días de vacaciones navideñas he pasado varios días de descanso a orillas del río Tormes. Tanto en los días despejados, como en aquellos cargados de nubes, he podido disfrutar de increíbles reflejos en las tranquilas aguas del río Tormes.