Hoy por fin hemos podido salir a pasear a última hora de la tarde.
Con mascarilla, con todas las precauciones, y con un poco de miedo también…
He decidido ir por un camino a las afueras del pueblo, para no encontrarme con mucha gente.
Y para mi sorpresa, en uno de los caseríos por los que he pasado, había un potro con un solo día de vida, una preciosidad!!!
Y allí he estado, disfrutando de este pequeño personaje, hasta que me ha sorprendido el atardecer, y he tenido que volver a casa antes de que anocheciera.
Este fin de semana he estado en la estación de esqui de Arette que es la que más cerca tengo de casa.
Esta vez hemos cogido un apartamento a pie de pista, y con solo abrir la cortina ya podíamos disfrutar de la vista a las pistas, o incluso del trabajo nocturno de las máquinas que por las noches preparan las pistas, para que los esquiadores las puedan disfrutar al día siguiente.
También ha sido todo una experiencia enfrentarse a la carretera nevada, y sacar el coche del montón de nieve que lo cubría…bufff!!!
Este fin de semana he estado de Madrid, aprovechando para visitar a la familia y hacer un poco de turismo.
Lo que más me ha llamado la atención han sido el templo de Debod y el palacio de cristal que no los conocía.
Dicen que en Madrid llueve poco pero mientras estaba en el templo de Debod llovío y llovió como si no hubiera un mañana. Menos mal que para cuando empezó a llover ya tenía hechas algunas fotos…
En estos días se exhibe en la sala Oxford de Zumaia la exposición colectiva de la asociación fotográfica Distira.
Como cada año, se nos da la oportunidad a los socios de exponer una de nuestras fotografías.
Este año también me he animado a participar. El año pasado expuse una fotografía nocturna, el anterior una de macro, y este año me he decidido por una de las fotos de paisaje de la playa de Barrica.
En conjunto, con una gran variedad de fotoografías, creo que ha quedado una exposición muy bonita.